En el
bosque de árboles húmedos
Atrapados
en su verdor por el musgo
Soy la
celta enamorada
En este
espejo de aguas
De un
rostro que ilumina
Mis fresias
y mi caldero.
Busco
en los renglones viejos
El beso
que me deja siempre
Y mi
corazón latiente
De mujer
en sus albores
Recoge enjambre
de flores
Con amor
para su hombre.
1 comentario:
Me gusta el poema por el tema y por esto de los celtas, todo el que escribe poemas, el que es poeta de casta tiene un vínculo con la arqueología, con el pasado, con eso que se fue pero que sigue siendo.
Ernesto.
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