Y la Calandria con su canto de amanecida
Me trajo el despertar de la GolondrinaQue aun lastimada,
volaba entre cipreses desnudos
Desparramando agonía.
Le conté de las adelfas que esperaban
…Su trinar embellecidas.
Le hable del caudaloso rio donde
Vertiera yo mis aguas un díaLe dije del verdor que la envolvía,
Para que recordara y así sanara
Sus alas vencidas, sus lejanas heridas.
Entonces vino la lluvia como bautismo,
Y el cielo se abrió en una primavera
…Que no entendían
Ni la Calandria… ni la Golondrina
Ni esto que Soy después de la llovizna.
Más, el cielo se despejó
Ilumino mi sendero abiertoY volé con la magia de los cuentos
A un verano cálido y pleno.
El cielo ya no era cielo
Eran mis fresias florecidasAromando aquel vuelo.
Una plegaria que la Alondra
La tuvo siempre guardada
Desde el jazmín la lejanía
Siempre supe que estabas allí
…Solo dormía en ti
¡El perdón y la sabiduría!
…. ¡La Alegría!...
1 comentario:
Tienes amor por las letras y eso se nota en cada estrofa de tus poemas.
Ernesto Cárdenas.
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